2015-09-01

El 30 de agosto de 1936 Juana Josefa Sagardia y seis de sus hijos (Joaquín, Antonio, Pedro Julián, Martina, José y Asunción) desaparecieron en una sima en el lugar de Legarrea. Casi 80 años después un centenar de personas acudieron al lugar con el ánimo de ofrecerles un homenaje. El acto que se desarrolló el pasado domingo frente a la sima fue sencillo pero muy emotivo. En el mismo tomaron la palabra la alcaldesa de Gaztelu, Maite Urroz; la periodista Zaloa Basabe; el historiador y presidente de Euskal Memoria Fundazioa, Iñaki Egaña, y el escritor y autor del libro "La sima", Josemari Esparza Zabalegi.

Ese mismo domingo, 30 de agosto, se celebraba en todo el mundo el Día Internacional de los Desaparecidos Forzosos. En el caso de Euskal Herria son más de 12.000 los casos registrados y aún sin aclarar, según subrayó Iñaki Egaña en su intervención. Por su parte, Josemari Esparza afirmó que Juana Josefa fue la "última sorgiña" de Nafarroa y añadió que "sólo la verdad logrará restañar las heridas".

En el acto estuvieron presentes familiares de los Sagardia Goñi, así como los parlamentarios Dabid Anaut y Virginia Alemán, representantes de varias asociaciones memorialistas y el albañil y anarquista de Cascante Lucio Urtubia. Con el canto colectivo de "Txoriak txori" y "Agur Jaunak" se dio por concluido el homenaje.    

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